Los trastornos de salud mental todavía constituyen un problema serio y costoso a nivel mundial, que afecta a personas de todas las edades y de todas las culturas y niveles socioeconómicos. La depresión profunda es la cuarta en importancia por años de vida adaptada a una discapacidad y está próxima a ser la segunda causa de discapacidad a escala mundial. De los 450 millones de personas que se estima sufren de un trastorno de salud mental en el mundo, menos de la mitad recibe la atención que necesita.