En el estudio y tratamiento de la discapacidad se entrelazan, prácticamente, todos los dominios del saber, desde las ciencias más experimentales (la física o la biología) hasta las ciencias humanas y sociales (como el derecho o las ciencias de la información). Sin embargo, hay áreas de conocimiento que tienen mayor tradición de investigación porque las condiciones de discapacidad plantean problemas o cuestiones que atañen directamente a los objetivos propios de estas áreas. Las disciplinas de la psicología, la educación y la medicina son ejemplos paradigmáticos en este sentido.